Hice psicoterapia y psicología cognitiva durante años y gracias a esto comencé a encontrarme a mí misma y a descubrir que sufría dependencia emocional con las relaciones de pareja. Leí libros que me ayudaron a gestionar mejor mis emociones, y aunque había aprendido y sanado mucho, todavía me daba miedo estar sola, y seguía enganchándome en relaciones volviendo a repetir patrones antiguos. Inicié una relación complicada con un hombre que en un principio me cautivó con sus armas de seducción, pero resultó ser un sociópata narcisista mentiroso y mujeriego que hacía doble vida y aunque no me sentía valorada ni respetada por él, era incapaz de dejarlo. Entre el agotamiento del negocio que me tenía cansada y esta relación, empecé a somatizar mucha ansiedad y unas fuertes migrañas. Llegó un momento que no pude más y busqué ayuda en una psicóloga experta en dependencia emocional y a partir de ese momento aprendí herramientas para saber poner límites y saber estar bien sola conmigo misma y sobre todo a ponerme a mí en primer lugar.
Por fin conseguí dejar la relación y estuve aturdida un tiempo asimilando la experiencia, pero las migrañas continuaban y para mi sorpresa en un «tac» los médicos me detectaron un tumor cerebral. Después del «shock» de la noticia, comencé a replantearme toda mi vida. La operación salió bien ya que fue pillado a tiempo y a partir de ahí viví un cambio interior profundo…